La inclusión es un aprendizaje básico a la hora de
educar a los niños. Todos los padres debemos enseñarles que todos somos
iguales, que tenemos los mismos derechos y oportunidades, que nuestras necesidades
sean respetadas y nuestras capacidades consideradas, seamos como seamos y de
donde seamos.
La amistad en la infancia puede verse perjudicada
por factores propios de cada niño como, por ejemplo, el egoísmo natural, los
problemas de disciplina o poca educación empática. Todos estos llevan a un solo
resultado: la exclusión entre compañeros. Esta hace que el aula de clases se convierta en todo
un campo de guerra entre aquellos niños que se llevan bien ente sí y aquellos
que son de alguna forma dejados a un lado debido a que no cumplen con ciertas
expectativas. Causando en ellos malestares emocionales que pueden afectar su
autoestima, confianza y rendimiento escolar.
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